ND / Tal Cual
Carta a un hijo de Putin* * (Al hijo mayor de edad)
Querido muchacho: Por allá, por tu amada patria, anda nuestro Jefe de Estado. No te preocupes. Aunque él diga que la Unión Soviética es chévere, Rusia no dará marcha atrás y el avance de tu país hacia la democracia será inevitable; ello a pesar de tu papá, que a veces dice unas vainas que asustan, como cuando ante un micrófono que quedó abierto celebró las supuestas violaciones de mujeres de las que se acusa a un colega suyo por la policía de su propio país con frases como “¡Vaya machote!” y “le tenemos envidia”. Lo peor es que cuando el Kremlin aclaró la situación dijo que era sólo “¡un chiste!”, cosas del humor ruso. Pero volviendo a lo nuestro, te decía que no te preocupes por la Unión Soviética, que no volverá, que con el favor de Dios no tendrás otro Stalin de cuya voluntad exclusiva dependa el destino de millones de seres. En Venezuela, sin embargo, la cosa es distinta. Como diría Serrat, no corren buenos tiempos para la gente marchosa. Nosotros avanzamos hacia lo que ustedes eran, o, puesto en palabras de un cubano disidente: “Lo peor que tiene el futuro es el pasado que nos espera”. El Congreso de tu país se ha negado a escuchar a nuestro Presidente. Quiero que sepas que no vemos en ello ninguna actitud enemistosa. Simplemente nos imaginamos que como se acercan las vacaciones les daría a los diputados cierto temor la posibilidad de quedarse sin verano. Lo que sí asombra es que el Kremlin diga que es una visita privada. Y yo pregunto: ¿Privada de qué?, si se nos anuncia que cuesta varios cientos de millones diarios y cuenta con una comitiva cercana a las 100 personas y que hasta piensan matar a un caviar para comérselo, en vara, suponemos. Por otro lado, a pesar de los acuerdos en la enemistad con Bush, que es el único punto en el cual existe un consenso casi universal, hay, sin embargo, una diferencia entre tu papá y el nuestro: el tuyo lo va a visitar la semana que viene. De modo que la siembra de casquillo no funcionó mucho. No te inquietes: todos somos pragmáticos, el billete siempre va primero. Ahora, por estos lados, se habla mucho de la compra de submarinos de los que fabrica tu papá. Suponemos que serán para reprimir manifestaciones opositoras en las playas venezolanas. Entiendo que en tu país, a propósito de armamento, se está armando un escándalo por lo de las comisiones en la compra de armas. Diles que no se hagan problema por ello, que a cualquiera se la va el tiro por la culata, más si se trata de una Kalashnikov. Por nuestro lado, no se investiga nada porque ya aquí nos venció la fuerza de la costumbre. Pues nada, un abrazo. Dile a los que aplaudieron el regreso de la URSS que si tanto les gusta, aquí los esperamos, pero que de todas maneras no cuenten con nada serio, gracias a Dios.
domingo, julio 01, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario